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Un padrino ejemplar

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Un padrino ejemplar

Asegura el dicho que los niños vienen con un pan bajo el brazo, pero en el caso de la pequeña localidad de Colmenar, en la Alta Axarquía, esta frase se hace extensiva a toda su etapa de estudiantes. Y es que desde hace más de cincuenta años todos los alumnos de los diferentes niveles de enseñanza pueden optar a las becas que ofrece la Fundación Alfonso Molina Padilla, un ilustre vecino del municipio axárquico que llegó a ser diputado en las Cortes Generales por el Partido Conservador -el de su paisano, el malagueño Antonio Cánovas del Castillo- a finales del siglo XIX.
Tras su muerte y sin descendencia directa, sus herederos crearon, atendiendo a su última voluntad reflejada en su testamento, una fundación para ayudar a los jóvenes de su pueblo natal a que estudiaran y tuvieran un futuro mejor. Así nacieron, hace más de cincuenta años, las becas Alfonso Molina Padilla, que cada año entrega el Ayuntamiento, en colaboración con esta organización, que tiene sedes en Madrid y Colmenar, y entre cuyos patronos está el Arzobispado de Madrid.
En la edición de este año se han entregado un total de 123 subvenciones para jóvenes estudiantes del municipio de las enseñanzas de Bachillerato, Formación Profesional, grados universitarios, másters y oposiciones, por un importe total de 58.000 euros. El acto institucional se celebró en el salón de la Casa de la Cultura, con la presencia del alcalde de Colmenar, Pedro Fernández, del secretario de la Fundación en el municipio, Francisco Cesáreo Sánchez, los becados y sus familias.
El regidor destacó «el apoyo a la formación y conocimiento de los jóvenes que son posibles gracias a su fundador y vecino de Colmenar, Alfonso Molina Padilla», quien donó parte de su herencia a la constitución de la entidad que aporta ayuda y amparo a los jóvenes huérfanos y sin recursos del municipio, y que con los años se ha ido ampliando a todos aquellos que quieran estudiar y obtengan buenas calificaciones.
Por méritos
Asimismo, el alcalde resaltó la ampliación en el número de becas concedidas este año, y su presupuesto en la cuantía total, que ha alcanzado los 58.000 euros, que se han distribuido entre los estudiantes según sus calificaciones, rendimiento, dificultad y lugar donde desarrollan sus estudios. Por último, felicitó a los beneficiarios por el aprovechamiento de estos fondos, «que les ayudarán a continuar con sus estudios y culminar su carrera profesional».
La Fundación Alfonso Molina Padilla incluye una beca especial, a favor del Ayuntamiento de Colmenar, por un importe de 5.000 euros, destinadas al pago de libros de texto del colegio público Virgen de la Candelaria del municipio. Durante el evento se anunció además la apertura del plazo para la presentación de las solicitudes a las becas de estudio para el presente curso.
Alfonso Molina Padilla nació en Colmenar en 1875 y falleció en Madrid en 1956. Hijo predilecto de la localidad, marchó a la capital de España muy joven, donde culminó sus estudios y conoció al futuro rey Alfonso XIII, que posteriormente le nombró caballero. Fue diputado en las Cortes Generales, por el Partido Conservador, bajo la dirección de Antonio Cánovas del Castillo. Heredero de un importante patrimonio, y sin descendencia directa, donó parte de su herencia a la constitución de esta institución benéfica.
El organismo está dirigido en la actualidad por su sobrina-nieta, Gema Isabel. Una escultura inaugurada en 2003 en la céntrica plaza de Los Carros recuerda a este personaje ilustre, hijo predilecto de Colmenar.
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